El
rímel o máscara de pestañas es uno de los cosméticos básicos a la hora de
maquillarnos. Incluso muchos expertos en maquillaje te dirán que un toque de rímel es suficiente para cambiar tu
rostro, aunque no lleves nada más de maquillaje.
De
todos modos, y pese a su ventajas estéticas, debemos tener cuidado a la hora de
aplicarnos el rímel para hacerlo de
manera correcta, porque unas pestañas mal maquilladas pueden resultar
tan feas estéticamente como la falta de rímel. Hay que pensar que un exceso de
este producto lo único que conseguirá es que se vean apelmazadas.
Para
maquillarnos los ojos con rímel debemos saber cómo aplicarlo. Se
trata de un proceso bastante sencillo pero
que debemos seguir paso a paso para que su efecto sea el correcto. Es
recomendable que empieces por poner el rímel en las pestañas de la parte de
abajo, colocando el aplicador de manera que quede perpendicular al ojo y
paralelo a las pestañas.
A
continuación aplica el rímel a las pestañas superiores del ojo. Para hacerlo
debes pasar el cepillo desde la base a su punta. Luego pasa un peine de pestañas, para eliminar cualquier grumo que
te haya quedado y separarlas, en el caso de que te hayan quedado un poco
apelmazadas.
Eso
sí, cuando acabes de maquillarte debes asegurarte de que no te hayan quedado
restos de rímel sobre el párpado o debajo de los ojos. En el caso de que te
haya sucedido, limpia con un algodón.
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Fuente: Femenino